martes, 22 de abril de 2014

¿ UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE? CÓMO Y POR QUÉ

El comer abundantes verduras y frutas diariamente, tomar leche o yogurt con poca grasa, preferir el pescado, pavo, pollo o carnes rojas sin grasa. El consumo de legumbres y granos enteros y sobre todo beber mucha agua. Todos estos alimentos nos permiten estar sanos y vivir mejor, porque aportan una cantidad suficiente de proteínas, grasas esenciales, minerales, antioxidantes y agua. El funcionamiento de nuestro cuerpo gracias a ellos es mucho mejor y este crea los mecanismos para defenderse de las enfermedades de las cuales somos más propensos a tenes. Todo esto es a lo que llamamos UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE.

E l adulto mayor y su alimentación debe ser balanceada y para obtener todos los beneficios mencionados, se encontró una lista de los alimentos que deben ser consumidos con la cantidad exacta diaria.

 PLAN DE ALIMENTACIÓN PARA EL ADULTO MAYOR

  •  2  A 3 tazas de leche o yogurt con poca grasa (un yogurt, un trozo de quesillo o una rebanada de queso reemplazan una taza de leche)
  • 1 presa de pescado fresco o en conserva, o pollo o pavo o 1 huevo (El día que coma legumbres o huevo, no necesita comer carne)
  • 2 platos de verduras, crudas o cocidas
  • 2 a 3 frutas o jugos de frutas naturales
  • 1 ½ a 2 panes, de preferencia batidos (marraqueta) o pan de molde
  • 1 a 1 ½ tazas de legumbres cocidas dos veces por semana.
  • El resto de los días puede comer arroz, fideos, sémola o papas cocidas en cantidad moderada
  • Una pequeña cantidad de aceite para cocinar y aliñar las ensaladas
  • Muy poca azúcar
  • 6 a 8 vasos de agua

  ¿PESCADO, PAVO O POLLO?

Estas 3 carnes contienen proteínas, hierro y zinc, ayudando a renovar y reparar los tejidos del cuerpo, previenen la anemia y nos defienden de las enfermedades.

Las grasas del pescado, del tipo omega 3, ayudan a prevenir las enfermedades del corazón. Como el atún, jurel o trucha, que se recomienda ingerir al menos 2 veces por semana. La mejor manera de prepararlos es a la plancha, al vapor o al horno y los condimentos deben ser a base de jugo de limón, pimentón, cebolla, champiñones, tomate, ajo o curry. Le quedarán sabrosos, sanos y nutritivos que es lo más importante. Puede sacar el exceso de sal del pescado en conserva lavándolo en un colador fino.

Las carnes rojas altas en grasas (vacuno, cerdo y cordero), las cecinas, embutidos, las vísceras (hígado, riñones y sesos) y la yema de huevo contienen grasas saturadas y colesterol, peligrosos para el corazón. Cómalos sólo en ocasiones especiales y en muy pequeña cantidad.

GRASAS Y ACEITES, ¿QUÉ TANTO ME AFECTAN?

El incluir aceites en cantidades pequeñas diariamente es recomendable ya que este contiene ácidos grasos esenciales para la salud, pero no es bueno abusar de él. Es preferible y más saludable los aceites de canola o soya, que contienen grasas omega 3, oliva u otro aceite vegetal.

La mayoría estamos acostumbrados a comer mantequilla, cremas, mayonesa, paté y productos de pastelería con crema, pero lo que no tomamos en cuenta es la cantidades de grasas saturadas y colesterol, además de calorías. Lo mejor será privarnos de estas delicias grasosas y consumirlas en ocasiones especiales, al igual que las frituras. Lea siempre la etiqueta de los alimentos que compra. Prefiera aquellos que contienen menos sodio (sal).

Y LO MÁS IMPORTANTE ES: TOMAR BASTANTE AGUA

Con la edad, la sensación de sed disminuye. El agua es esencial para el buen funcionamiento de los riñones, evita la deshidratación, mantiene la temperatura corporal normal y ayuda a la digestión. Asi que recuerde beber de 6 a 8 vasos de agua al día, aunque no tenga sed.



Fuente: http://www.inta.cl/consumidores/index.php/articulos/adulto-mayor

El estrés en las personas mayores

"Existen dos importantes teorías sobre la relación existente entre el envejecimiento y el estrés: la primera de ellas sostiene que la edad avanzada es un momento de la vida en el cual el organismo deja de controlar y gestionar bien el estrés; la otra teoría afirma que el estrés, sobre todo en su forma prolongada y crónica, acelera el envejecimiento; ambas teorías no son en realidad opuestas sino complementarias." - Olga Sanz Lucas, Psicogerontóloga

Definición del estrés
El estrés es una respuesta no-específica del organismo ante un estímulo específico, mostrando una respuesta de carácter fisiológico ya que ante un agente externo o interno que genera estrés se produce una segregación de hormonas que producen cambios diversos en el organismo.

En las personas mayores muchos aspectos tanto físicos como psicológicos funcionan adecuadamente pero siempre y cuando no requieran de mucho esfuerzo. Cuando un adulto mayor se rodea de situaciones estresantes, ya sean físicas o psicológicas, es muy probable que se desmorone antes que alguien más joven o bien que su percepción de la sensación de estrés sea mucho más intensa. Esto quiere decir que ambos organismos, joven y mayores actúan casi igual; pero variando de manera rápida y notablemente en los adultos mayores.


¿Cómo prevenimos el estrés en adultos mayores?
Si bien es cierto que muchos al llegar a la jubilación se sienten aburridos por que no tienen responsabilidades; también ocurre que cuando intentan llenar ese vacío con demasiadas actividades pueden crear en ellos una sobrecarga y mayor desgaste físico y mental. Como hemos mencionado en párrafos anteriores, el adulto mayor es más susceptible a situaciones estresantes que una persona joven. Entonces, hacer actividades que no requieran mucho esfuerzo está bien, e incluso participar de talleres y comunidades con actividades sociales siempre y cuando sepan cómo manejar el movimiento constante de las circunstancias. Cabe recalcar que el apoyo familiar es importante y que los adultos mayores no se sientan solos en sus actividades y responsabilidades es un fuerte aporte. 


viernes, 18 de abril de 2014

DEPRESIÓN: Prisión que algunos viven

En la actualidad existen diferentes y diversas enfermedades mentales que afectan la vida diaria del ser humano e interfieren con su desenvolvimiento natural; una de ellas es la depresión, la cual es definida por la Organización Mundial de la Salud como “Un trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración”.

Según el Instituto Nacional de la Salud Mental, existen diferentes tipos de depresión; el primero de estos es el trastorno depresivo mayor, el cual se caracteriza generalmente por interferir en la realización de las actividades diarias de la persona como trabajar, estudiar, dormir, comer, concentrarse y disfrutar de las actividades que antes le resultaban placenteras. Este tipo de depresión suele incapacitar el desenvolvimiento diario de la persona y puede ocurrir durante el transcurso de toda la vida de este.

El segundo tipo de depresión es la distimia, el cual es un tipo de depresión menos grave que el trastorno depresivo mayor, lo cual no significa que no interfiera en el funcionamiento diario de la persona y en su bienestar;  ya que sus síntomas son de larga duración, es decir, de dos años a más, lo cual no incapacita a la persona pero si interfiere en su desarrollo natural cotidiano. Probablemente las personas con distimia pueden llegar a padecer uno o más episodios de depresión grave a lo largo de sus vidas.

El tercer tipo de depresión es el Trastorno Maníaco Depresivo o Trastorno Bipolar, el cual no es tan común como los dos tipos de depresión mencionados anteriormente; el cual se caracteriza por un  cambio brusco en el estado de ánimo de las personas, que pueden ir desde un estado de ánimo muy elevado a un estado de ánimo muy bajo, es decir, euforia y depresión las cuales son totalmente opuestas. Ya que la euforia es un estado en el cual la persona se siente llena de energía y entusiasmo, e inicie todo tipo de ideas que muchas veces no tienen sustento; sin embargo en la depresión la persona suele sentirse agotado, inapetente y muchas veces melancólico. En este tipo de depresión normalmente el cambio que ocurre se da de forma gradual aunque en ocasiones puede ser brusco.

Se puede decir que la depresión no es algo normal en la vejez ni en el envejecimiento de la persona, generalmente los síntomas que los ancianos pueden presentar en la vejez suelen ser menos evidentes, ya que existen estereotipos que indican que los adultos mayores suelen estar siempre tristes lo cual no permite reconocer los sentimientos de tristeza o pena que pudieran estar sufriendo en realidad. El saber diferenciar entre su tristeza real con la que se cree tienen por ser viejos.

Asimismo los ancianos son más propensos a enfermedades graves, las cuales pueden llevarlos a la depresión ya que no encuentran una solución para esta, como la diabetes, osteoporosis, el alzheimer, etc; e incluso algunos de los medicamentos poseen efectos secundarios que podría llevarlos a  la depresión. En ocasiones una causa fundamental en la depresión de los adultos mayores son los cambios físicos y biológicos que estos experimentan, ya que pueden percibirlos con mayor notoriedad en la vejez; además de sentimientos de desesperanza y aislamiento contribuyen al desarrollo de la depresión en los ancianos en especial  los que presentan alguna discapacidad. En cuanto al tratamiento que los ancianos pueden recibir generalmente se dan con antidepresivos o psicoterapia aunque en ocasiones es una combinación de ambos.